Famoso monólogo final de El planeta de los simios (1968), de Franklin J. Schaffner.
"He vuelto. Estoy en mi casa otra vez. Durante todo este tiempo no me he dado cuenta de que estaba en ella. ¡Por fin lo conseguí! ¡Maniáticos! ¡La habéis destruido! ¡Yo os maldigo a todos! ¡Maldigo las guerras! ¡Os maldigo!"
2 piquitos de oro:
La ví con dieciocho años en el verano del 68. Esa escena final... Recuerdo el suspense de los que estábamos en la sala con el corazón en un puño, pendientes del desplazamiento de Taylor-Heston sobre su caballo... hacia la izquierda, sí, pero... ¿ hasta dónde...? De pronto, en la parte inferior izquierda de la pantalla asomó apenas la punta de una punta de "algo". ¡Juro por lo más sagrado, que supe en ese mismo instante lo que venía a continuación, unos segundos antes de que todos lo viéramos! ¿Alguien recuerda haber tenido esa súbita inspiración acerca de uno de los mejores finales de la historia del cine...?
¡Pobre Taylor! From chimpan-a to chimpan-z
Clásico de la vida
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