10) Expiación: Más allá de la pasión: A pesar de un punto de partida bastante sobado, amor imposible entre una joven de clase alta y uno de los criados, el inglés Joe Wright se confirma como uno de los directores a seguir con éste, su segundo trabajo, una película con una fantástica primera mitad y uno de esos planos secuencia de los que hacen época.
9) JCVD: La película más rara del pasado festival de Sitges, un desmitificador ejercicio de metacine alrededor de la figura del tigre de Bruselas. Una cinta donde Van Damme interpreta al Van Damme más humano posible, mostrándose vulnerable, falto de amor e incluso algo idiota. Una película que aunque no resulta ni mucho menos redonda, es un alucinante experimento fílmico cargado de humor, no se la pierdan.
8) Cashback: La fusión de lo fantástico con lo cotidiano, si está bien tratada, siempre me ha parecido fascinante, y esta película acierta de lleno en la forma y el tono. El filme es básicamente un comedia romántica de las de chico conoce a chica, con el aliciente añadido de que el chico puede parar el tiempo. Romance, belleza, humor y muchas tías buenas.
7) 4 meses 3 semanas 2 días: Drama que aborda el peliagudo tema del aborto clandestino en la Rumania de finales de los 80. Una película que con una dirección casi de documental, le saca mucho partido a la actuación de sus intérpretes femeninas.
6) The Fall: Una aventura de piratas y bucaneros a través de 28 de los rincones más hermosos del planeta, con un acabado visual impresionante, mucha inventiva y una historia con la capacidad de emocionar.
5) No es país para viejos: Los hermanos Coen son unos especialistas en pasar el cine de intriga por el turmix de lo absurdo. En sus películas los planes nunca salen bien, siempre hay elementos secundarios de la trama que cogen una relevancia inesperada y el desenlace acostumbra a ser de lo más fortuito. En esta ocasión hay que añadirle grandes dosis de violencia y un asesino que pasará a la historia, sino por su mala leche, quizás por su peinado. Recuerden este nombre: Anton Chigurh.
4) Sweeney Todd: el barbero diabólico de la calle Fleet: Cuando Tim Burton pega fuerte, uno no puede hacer más que rendirse a sus pies. Y lo hace recurriendo a un musical donde pone a cantar a sus actores fetiches. Una pequeña joya de un director que, últimamente, arrastraba demasiados altibajos.
3) Wall-E: Peliculón de Pixar con una primera hora que es una autentica carta de amor al cine mudo, un autentico prodigio de técnica e imaginación que emociona y deleita al espectador. A partir de la primera hora la peli entra en terreno más convencional pero manteniendo siempre un nivel muy alto, una auténtica genialidad.
2) Déjame entrar: Una película que desnuda el mito del vampiro de todos los maniqueísmos absurdos y pasados de moda que arrastra un género cinematográfico tan longevo como éste, y que lo hace sin la intención de crear escuela, sino tan solo para que la historia brille tan intensamente como se merece. Un objetivo que consigue, sin duda.
1) Los Cronocrímenes: Nacho Vigalongo debuta en el cine con una película realizada con un solo propósito: filmar el mejor principio posible para un filme de suspense. Y la película no solo consigue eso, sino que además sigue tomando las decisiones adecuadas durante todo su metraje. ¡Aquí en el Quesito somos Superfans de este señor! Por eso le hemos dado el primer puesto, ¡felicidades Vigalongo!
Y como todo Sherlock Holmes tiene su profesor Moriarty, he aquí el reverso tenebroso del año, las 10 películas que no hay que ver:
10) Indiana Jones y el reino de la Calavera de Cristal: Mientras veía la película sentado en mi butaca del cine, había una pregunta que no podía sacarme de la cabeza; ¿por qué lo han hecho? ¿Por qué? Con lo fácil que hubiera sido dejar las cosas como estaban, o simplemente hacer como en tantas otras franquicias (James Bond, Batman…), donde cambian al actor a su antojo (¿qué tal Clive Owen enfundándose el sombrero?). Pero en fin, ahí tenemos al nuevo Indy tropecientos años tarde y sin nada que podamos hacer al respecto, con los peores malos de la saga y la peor de las tramas. Olé tus huevos, Lucas.
9) Ultimátum a la Tierra: Película que entra en el puesto número nueve de la lista por dos razones; por innecesaria y por sosa. De la versión antigua la gente recuerda la mítica frase Klaatu barada nikto, de la nueva la gente recordará que nadie dijo o hizo nada interesante. El mayor logro de la cinta reside en conseguir que no desentone la interpretación del lila de Keanu Reeves, una interpretación que resulta tan anodina y deslucida como el resto del metraje.
8) Mamma mia!: Una película que funciona básicamente en unidades de tres: un par de minutos para situarnos ante un inminente tema musical, luego la gente se desmadra cantando y bailando sin ton ni son, y después el guión se retuerce para volver a una endeble trama argumental que hace aguas por todos lados, y es que la cinta arrastra consigo un hecho irrefutable: las canciones nunca fueron escritas para el musical en que se basa, ni mucho menos para la película en sí. Pero todo hay que decirlo, la banda sonora es cojonuda.
7) La escafandra y la mariposa: En el 2005 la película tostón por excelencia fue Last days, y este año le toca el turno a la conmovedora historia de un paralítico que escribe. ¡Dios! Nunca se había hecho nada parecido, o espera un segundo, quizás sí…
6) X-files: Creer es la clave: Película que no pasa de ser el típico thriller, de manera que si quitan a Mulder y ponen a Morgan Freeman en su lugar apenas notarían el cambio (¿alguien ha dicho "El coleccionista de amantes" o "La hora de la araña"?). Y es que, perdonen mi ignorancia al respecto, pero, ¿donde están los bichos verdes montados en platillos? Y ya puestos, ¿donde está la química entre sus protagonistas? (Ah, si, en su cuenta bancaria).
5) Los crímenes de Oxford: Este no ha sido el año de Alex de la Iglesia, ni en cine con este fallido thriller, ni en televisión con la sosa serie Plutón BRBNero. Realmente parece como si nada acabara de funcionar en esta película, aparte de que alguien debería decirle a Elijah Wood que para llevar patillas, primero hay que tener pelo en la cara.
4) Wanted (Se busca): Otro bodrio basado en un comic, aunque aquí la cosa resulta más perra que de costumbre, ya que en vez de a los supervillanos que protagonizan el comic original, tenemos a tejedores asesinos súper poderosos. ¡Por favor, no me hagan reír! La obra en que se basa es gamberra y mordaz, mientras que esta película resulta desalmada y vacía. Una flaca excusa para que Morgan Freeman haga de Morgan Freeman, y Angelina Jolieu enseñe culo y tatus.
3) La isla de Nim: Esta es una de aquellas películas que nadie ve a no ser que se encuentre encerrado en un avión a 30.000 pies de altura y un desaprensivo la ponga en televisión, que es lo que me sucedió a mi, y en fin, ¿cómo lo diría? Niños, focas, Jodie Foster y un Indiana Jones de pega, saltar al vacío hubiera sido menos doloroso.
2) Hancock: Cobarde película que no sabe como afrontar las repercusiones de una premisa interesante, por lo que se saca de la manga un patoso giro argumental que lo vuelve todo ridículo, pero que también lo hace más manejable en manos de un guionista borderline.
1) El incidente: Cuando un director de la talla de M. Night Shyamalan la caga, lo hace a conciencia y el mundo se pone a temblar, y es que la película cae a un nivel que otros directores menos diestros no podrían conseguir nunca. ¿Qué es El incidente? ¿Una comedia? ¿Un thriller? Nadie parece saberlo y a algunos incluso no nos importa. La verdad es que la peli causa risa en los momentos de tensión, y tensión en los momentos de risa, así que mi enhorabuena al señor Shyalaman, ha logrado la peor película del año, ¡viva!
Solo añadir que le agradecemos al amigo Machete otorgarnos el reciente premio Symbelmine. Nada más, muchas gracias a todos por haber estado allí durante este 2008 y esperamos volver a verlos el año que viene. Sean buenos y, como siempre, nos leemos.