Elprimerhombre ha visto American Splendor, de Shari Springer Berman y Robert Pulcini, una interesante película que une la comedia con el documental, basándose en los cómics de Harvey Pekar que se editaron a partir de 1975, con ilustraciones de dibujantes tan importantes como el reputado Robert Crumb.
El señor Harvey Pekar es un tipo aburrido que no parece tener estimación por nada salvo por su obsesión por coleccionar discos y cómics, y lleva una vida tan ordinaria que su segunda mujer también le abandona. Aún así, harto de trabajar en el archivo de un hospital de Cleveland, un día decide compaginar su rutinario empleo con escribir sus vivencias en viñetas, y al no saber dibujar se las muestra a su amigo Robert Crumb, al que conoció unos años atrás. Este se las lleva a su casa para ilustrarlas y un tiempo después se empiezan a editar las historias en un cómic llamado American Splendor (Maravillas Americanas). Gracias a su popularidad, una fan que no ha podido conseguir el último número se pone en contacto con Harvey para que se lo envíe. Y tras unas cuantas cartas y unas llamadas quedan para conocerse, y la verdad es que casi son tal para cual.
El señor Harvey Pekar es un tipo aburrido que no parece tener estimación por nada salvo por su obsesión por coleccionar discos y cómics, y lleva una vida tan ordinaria que su segunda mujer también le abandona. Aún así, harto de trabajar en el archivo de un hospital de Cleveland, un día decide compaginar su rutinario empleo con escribir sus vivencias en viñetas, y al no saber dibujar se las muestra a su amigo Robert Crumb, al que conoció unos años atrás. Este se las lleva a su casa para ilustrarlas y un tiempo después se empiezan a editar las historias en un cómic llamado American Splendor (Maravillas Americanas). Gracias a su popularidad, una fan que no ha podido conseguir el último número se pone en contacto con Harvey para que se lo envíe. Y tras unas cuantas cartas y unas llamadas quedan para conocerse, y la verdad es que casi son tal para cual.
Paul Giamatti es el actor elegido para el papel de Harvey Pekar y es la mejor elección que se podría haber hecho. Tanto por sus caras como por sus gestos, recuerda mucho al personaje de los cómics. Hace un buen retrato del tipo que siempre parece estar asqueado de la vida por su modo tan pesimista de verla. Este actor es también conocido por sus papeles en Entre copas y por La joven del agua y obtuvo nominaciones en los Oscars y en los Globos de Oro por sus actuaciones en la mencionada Entre copas y en Cinderella Man.
La película está bien contada y empieza muy bien, con unos niños disfrazados de superhéroes pidiendo caramelos en las puertas de las casas (salvo Harvey que no va disfrazado, sino que va de sí mismo) y las letras de crédito son planos enmarcados como si fueran viñetas, un recurso (el del cómic) que será utilizado durante toda la película para ubicarnos en el tiempo o para saber en qué está pensando el personaje. Sin embargo, este sistema se usa equivocadamente en algunos momentos, como los dibujos animados de Harvey en el supermercado o cuando la chica va a la estación donde ha quedado y se imagina a él como diferentes tipos también animados.
El tono de documental viene dado por la presencia del propio Harvey Pekar que con su peculiar voz, un tanto afónica, narra casi todos los momentos importantes de la película, dando credibilidad a lo que vemos. De esta manera, los guionistas y directores Shari Springer y Robert Pulcini mezclan, con cierta soltura, realidad, cine y cómic, mostrando un buen ejercicio de estilo que a veces intenta unir al personaje real con el actor que le representa, metiendo entrevistas que tuvo Harvey Pekar en programas de televisión (donde se mofaban de él) o cortando una escena de la película donde el verdadero Pekar se pone a hablar de su vida ante la cámara. También oímos la voz de Shari entrevistando a Harvey en la película, en decorados austeros, con fondos en blanco, donde resaltan los personajes y los objetos.
Sin embargo, mientras vas viendo la película te vas dando cuenta de que le falta algo a la historia sin saber por qué, ya que está bien dirigida, la música de jazz es sugerente y tiene una muy buena fotografía, pero quizás sea el modo de ser del personaje lo que va haciendo que caiga el interés que al principio se tenía sobre él, siendo al final un poco cansino. Y donde también se hecha de menos al personaje de Crumb, porque las pocas escenas en las que aparecen los dos juntos son las que más llaman la atención, al verlos tan inmersos en su peculiar mundo.
En definitiva, una película independiente bien rodada, con una buena actuación de Paul Giamatti en el papel del raro Harvey Pekar, en la que quizás le hubiera faltado algo más de ritmo, ya que siendo de corta duración, llega a decaer el interés por el personaje.
Un saludo!
Leer critica American Splendor en Muchocine.net
7 piquitos de oro:
Qué linda manera de homnajear a un gran personaje y sobre todo al arte de la historieta. Este film además cuenta con un gran Giamatti. Saludos!
A mí esta peli me encantó; efectivamente, Giamatti se sale.
Un saludete!
Lo mejor de la peli es Giamatti y lo lograda que está como adaptación de comic 'adulto' (no Spiderman y esas cosas llenas de colores y dinamismo).
Si te gustaron las escenas con Crumb, supongo y espero que habrás visto el documental Crumb de Zwigoff. Fascinante.
Es lentorra como pocas, estoy de acuerdo. La historia carece de interés para mi y, eso sí, la actuación de Giamatti es muy buena.
Si de cómics se trata, prefiero Ghost World o Spiderman 2... ejem...
No conocía ésta película pero tiene muy buena pinta, así que me la guardo para este fin de semana. Muy interesante tú blog. Un saludo.
Con el tiempo se convertirá en una rareza de culto.
Hola:
Solo decir que ya he puesto el link de Quesito Rosa en mi Blog y que gracias por las colaboraciones de Cecil B. Demente...jejeje
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