Elprimerhombre les va a comentar La pianista, de Michael Haneke. Si, normalmente, cuando la gente va a ver una película no quiere que le cuenten nada ni, a veces, tan siquiera el argumento, con Haneke no importa porque siempre te coge desprevenido. Para mí es de los pocos directores de hoy en día que puede sorprenderme, porque, aun conociendo su forma de dirigir, aun sabiendo que en algún momento va a haber algún suceso que me chocará, siempre consigue dejarme con la boca abierta en alguna escena en concreto.
En La pianista, Isabelle Huppert, que está espectacular como siempre, es una profesora de piano que da clases en un conservatorio y uno de los alumnos que acaba de ser admitido para recibir sus clases intenta seducirla. Pero el chavalín no sabe dónde se mete, bueno, nadie lo sabe, porque a partir de aquí empieza el show de Haneke.
No intento exagerar pero es que me atrae la manera de explicar las cosas de este director. Le gustan las escenas quietas en silencio con su medida justa e intencionada.
Es un especialista en hurgar en las heridas y joder al espectador, dejándolo pensativo con sus finales abiertos.
En Caché, que es del año pasado, hacía lo mismo, y además ya empezaba con un plano quieto y largo, haciendo meditar ya al espectador. Y el final es típico suyo: él muestra una escena y tú sacas tus propias conclusiones.
Funny Games la vi cuando se estrenó y tengo un buen recuerdo de ella, sobre todo porque aún no había visto nada igual en un celuloide. El final me dejó parado. Pero tengo que verla otra vez porque he olvidado muchas cosas y ahora quizás tenga otro punto de vista ya que conozco más a su director.
En total, a quien le guste ver un cine diferente y peculiar que vea cualquier película de Haneke, que por lo menos no le dejará indiferente.
Un saludo!!
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