12 diciembre 2011
Grandes monólogos cine (XXIII)
Esta escena de
Lo que el viento se llevó
(1939) seguramente sea el monólogo por antonomasia de la historia del cine.
"(...)
A Dios pongo por testigo de que jamás volveré a pasar hambre
(...)"
1 comentario:
Möbius el Crononauta
12 de diciembre de 2011, 12:57
¡No hay nada más mítico!
Responder
Eliminar
Respuestas
Responder
Añadir comentario
Cargar más...
‹
›
Inicio
Ver versión web
¡No hay nada más mítico!
ResponderEliminar